Para ello volvimos a leer el cuento del "Monstruo de colores", buscamos objetos de color rosa en el aula y clasificamos bolas de agua. Para ello utilizamos una bandeja, que nos trajo la madre de Aarón que nos vino genial, en ella metimos bolas de agua de distintos colores y lo que teníamos que hacer era coger solo aquellas que eran de color rosa, como el monstruo enamorado, y meterlas en una caja más pequeña.
Pero la tarea se puso un poco difícil cuando les dije que lo tenían que hacer con un medidor muy pequeño. Algunos utilizaron las manos porque les resultaba muy difícil enganchar las bolas y luego las metían en el medidor pero no me importaba porque lo que quería trabajar con esta actividad, además de diferenciar el color rosa, era ejercitar la motricidad fina y como estas bolas son resbalacidas, solo con intentar cogerlas con las manos sirve para trabajarla.
En esta ocasión se esmeraron mucho en colorear el monstruo y es que cada vez colorean mejor.
Como ya os comenté en la reunión, de momento, los lunes y los viernes haremos psicomotricidad con Anabel.
El primer día fue toda una experiencia ya que la mayoría no conocía el salón de actos. Al ser un espacio muy grande estaban un poco alucinados y emocionados.
Anabel los sentó en asamblea para explicarles lo que harían allí y a continuación fue realizando con los peques distintos ejercicios.
Como podéis ver en el principio del vídeo, la emoción era tan grande que no eran capaces de esperar a que Anabel dijese ya.
Fue una experiencia muy bonita y los peques quedaron encantados.
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