El pasado jueves recibimos la visita de una gran científica: Carmen, a quien todos conocemos como la mamá de nuestra compañera Naiara.
Juntas nos hicieron primero un truco de magia, porque la magia tiene mucho que ver con la ciencia. Era muy sencillito: puso una moneda en la mesa, encima colocó un vaso transparente de cristal (y todos veíamos la moneda), de repente llenó el vaso de agua y la moneda había desaparecido, el reflejo del agua nos engañaba y no nos dejaba verla.
Después nos enseñaron a hacer otro experimento que después hicimos todos y todas. Comenzamos coloreando una flor con muchos pétalos, y escribiendo un mensaje en el centro de la flor. Después coloreamos un plato de plástico con un rotulador y echamos un poquito de agua, consiguiendo con ello que el agua se tiñese del color que habíamos pintado.
Después recortamos la flor y doblamos cada pétalo hacia dentro, y al colocarlo sobre el agua del plato, gracias a la capilaridad del agua, la flor se fue abriendo poquito a poco.
Antes de despedirnos le dimos un fuerte aplauso a las dos científicas por enseñarnos tanto y le entregamos el diploma de Científica como agradecimiento.
Muchas gracias a las dos por enseñarnos tanto. Ahora que estamos en casa, todo el que quiera puede probar a hacer el experimento y enseñárselo a toda la familia.
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